The product has been added to your cart

Tapón pequeño

El pequeño enchufe para principiantes

¿Busca nuevas sensaciones? El placer anal es una práctica a menudo rodeada de aprensión. Sin embargo, esta zona es muy erógena y ofrece multitud de sensaciones que pueden desembocar en un orgasmo relámpago. El pequeño plug es, por tanto, el accesorio perfecto para empezar a disfrutar del placer anal con suavidad

More
per page
Showing 1 - 6 of 12 items
Showing 1 - 6 of 12 items

¿Qué es un plug anal?

El tapón anal es un sextoy diseñado para preparar el ano para la sodomía, o simplemente para proporcionar placer anal. Por supuesto, también puede utilizarse para la vagina, pero su forma cónica ha sido diseñada especialmente para la zona rectal, así como sus dimensiones adaptadas a este uso.

¿Por qué utilizar un plug anal?

La primera razón es prepararse para cualquier penetración anal, ya sea sodomía o fisting. De hecho, la forma del tapón es ideal para una introducción suave. Pero también es un buen sextoy para estimular la próstata, que también es el equivalente al punto G para los hombres. El plug anal, con su forma adaptada, tocará entonces la próstata, comúnmente conocida como punto P. Algunos enchufes están diseñados específicamente para este fin, como el aneros.

Otra forma de utilizar el pequeño plug es duplicar el placer durante la masturbación. Durante este placer solitario, tanto el hombre como la mujer pueden introducir un plug al mismo tiempo. El hombre, gracias a su próstata, verá entonces sus sensaciones y su placer multiplicados por diez. El plug es, por tanto, un accesorio sexual que tiene múltiples usos, aunque el principal es preparar el ano antes de la penetración, dilatando esta zona poco a poco. De hecho, el consolador anal se utiliza también y sobre todo para relajar los músculos que rodean el ano, con la intención de una dilatación natural, y para reducir los riesgos de desgarros rectales.

¿Para quién es el pequeño enchufe?

El pequeño tapón es para todos, pero especialmente para los principiantes y los que no tienen demasiada confianza en aventurarse por esta zona. Las primeras veces pueden ser intimidantes, pero no hay que temer ni avergonzarse, ya que el orgasmo prostático, en los hombres, es aún más potente durante la eyaculación.

El pequeño plug suele ser la primera compra cuando se quiere descubrir el placer anal. Sería impensable empezar con una talla mayor, a riesgo de lesionarse. Sin embargo, nada le impide aumentar el diámetro con el tiempo y la práctica, por ejemplo con un tapón inflable que se adapte a sus deseos

Para las parejas curiosas, un pequeño plug también es una buena forma de empezar, siempre que se utilice un preservativo. Y para los juegos de rol, las sesiones temáticas o el placer de decorar uno mismo, los capullos de rosa se adaptan perfectamente a un primer uso, ya que son precisamente tapones pequeños.

Elección de un pequeño plug anal

No te arriesgues a dañar tu ano si te precipitas en el proceso: si lo que te atrae es un consolador grande, lo conseguirás, pero a su debido tiempo. Antes de eso, su elección debe ser un pequeño tapón, que le permitirá asegurar sus primeras veces con total seguridad.

Elegir el material adecuado

Este es uno de los criterios de selección más importantes. Para empezar, es esencial elegir un material que sea suave, impermeable, no tóxico, fácil de lavar y, sobre todo, resbaladizo. El más común es el tapón de silicona, que se ha hecho muy popular en los últimos años. Es un material sano, hipoalergénico, suave, muy liso y flexible. Además, la silicona no es porosa y se puede lavar muy fácilmente, lo que la convierte en una primera opción, especialmente para los principiantes.

El tapones metálicos tienen más o menos los mismos criterios, salvo que son mucho más duraderos en el tiempo y son inflexibles porque son muy rígidos. Además, su peso permite una mayor estabilidad y ejerce una mayor presión sobre los músculos del recto. Por último, es un material que reacciona mucho a las diferencias de temperatura, lo que lo convierte en un juguete ideal para divertirse variando las sensaciones entre el frío y el calor. Las joyas para el ano, también conocidas como Capullos de rosasiempre se diseñan con una base de metal.

El caucho también es un material común y agradable, porque está bien satinado y se puede insertar fácilmente. Sin embargo, siempre hay que comprobar el origen y el diseño de la goma, ya que el tapón puede resultar peligroso si no es hipoalergénico o si contiene ftalatos.

Al igual que con dildos los materiales varían y van de lo clásico a lo más atípico. El plug anal de cristal, por ejemplo, es bastante raro, pero esto es lo que lo convierte en un sextoy anal muy elegante. Su principal inconveniente es su fragilidad; el más mínimo golpe puede hacer que se rompa. Así que hay que tener cuidado de que no se caiga y, sobre todo, hay que asegurarse de que nunca tenga la más mínima astilla que pueda hacerle daño.

No se recomiendan los tapones de plástico, a menos que sean de ABS, que está certificado. Sin embargo, este material tiene una vida útil más corta, y hay que tener cuidado con las pinturas utilizadas para decorarlas, que pueden ser tóxicas.

Los plugs de madera también se encuentran entre los juguetes sexuales originales. A primera vista, lo tiene todo para gustar: rígido, liso, suave... Pero como es difícil conocer el proceso de fabricación, existe un riesgo. Si la madera es de mala calidad, puede contener astillas peligrosas para el usuario. Si la madera está tratada, barnizada o encerada con productos químicos, también puede ser peligroso. Por lo tanto, hay que tener cuidado antes de elegir un tapón de madera.

Más raros, y no recomendables, son los tapones de gelatina dura que casi siempre contienen ftalatos. Y cuando no es así, se desintegran fácilmente. Aunque se sienten bien, no son recomendables.

Un tapón también puede ser de látex, PVC, resina, pyrex o incluso inflable Esta última es muy popular entre los principiantes, ya que eligen gradualmente el diámetro a insertar.

Formas recomendadas

El cono es la forma más común entre los tapones. En general, tiene forma de sacacorchos con una base alargada, un espacio estrecho y luego una pera de gran diámetro que termina en una punta afilada. Algunos son más cónicos, otros más curvos o incluso estilizados. El tapón cónico es en cualquier caso la forma universal y recomendada para empezar.

Para el usuario experimentado, hay formas más naturales. Con ventilación en la base y aspecto de falos detallados, estos pequeños consoladores ofrecen una dimensión más realista.

Los tapones metálicos suelen estar estilizados para facilitar la estimulación de la próstata. Si bien es aconsejable practicar primero con los modelos clásicos, éstos pueden convertirse rápidamente en una segunda opción.

También han aparecido en el mercado formas más inusuales, como tapones vibratorios. Están equipados con un mando a distancia y envían vibraciones a las zonas más erógenas, estimulando la zona anal y el punto P del hombre. Por supuesto, hay muchos modelos diferentes, que van desde la forma clásica hasta los estimuladores, pasando por los tapones de rosario tailandeses.

Tamaños para empezar

Tanto si practicas la sodomía con un tapón como con tu pareja, lo mejor es empezar con un tamaño razonable. Un diámetro de 1 cm a un máximo de 3,5 cm es un buen comienzo. Los capullos de rosa también son buenos accesorios para este fin, ya que su diámetro no suele superar los 3 cm y su peso es razonable.

Al principio, lo importante es el diámetro insertable, más que la longitud. Puedes elegir un consolador de 16 cm, pero limitándote a un diámetro de 2,5 cm, lo que seguirá siendo un plug pequeño. Así que empieza con 1 o 2 cm, y luego aumenta gradualmente cuando te sientas preparada. Lo principal es escuchar a tu cuerpo y no forzar el ano.

Accesorios para vestir el enchufe

Si todavía te intimida el tapón, busca los que tienen una joya en el ano. Los capullos de rosa, por ejemplo, tienen un diamante de imitación o una cola de zorro en la base para hacer que esta parte de su anatomía sea aún más excitante.

Cómo utilizar un enchufe pequeño y qué precauciones tomar

La primera vez puede ser un poco incómoda y arriesgada, pero no te preocupes: todo el mundo ha pasado por ello. Lo más importante es hacer los deberes y escuchar a tu cuerpo, ya que cada persona es diferente. A algunas personas les resultará más fácil aumentar el diámetro rápidamente, mientras que otras necesitarán ser acondicionadas durante un periodo de tiempo más largo antes de poder realizar la sodomía.

En primer lugar, asegúrate de que tu sextoy se lava siempre a fondo con un jabón antibacteriano antes y después de su uso. En segundo lugar, es fundamental utilizar un lubricante a base de agua, y en cantidades abundantes. Como el ano no es una zona naturalmente lubricada, no hay que dudar en recubrir bien el sextoy y la zona a penetrar antes de nada. Además, no dudes en explorar suavemente con un dedo al principio: acaricia la zona alrededor del ano, haz movimientos circulares, siente cómo se contraen o relajan los músculos en función de tus movimientos y de las zonas masajeadas. Cuando te sientas preparado, lubrica el dedo meñique y penetra en la primera falange sin forzar.

Una vez hecho esto, puedes pasar al tapón más pequeño y hacer lo mismo con él. Si sientes que no funciona, no hay prisa: tómate tu tiempo para estimular el ano y dilatarlo poco a poco, sin parar de lubricar. De nuevo, haz pequeños círculos, ampliándolos a medida que avanzas, hasta que tus músculos estén preparados para más. Puedes hacer una simple penetración o ir de un lado a otro, dependiendo de tu propio placer.

Asegúrate de mantener el pequeño tapón bien lubricado en todo momento: forzar su entrada puede provocar desgarros en el tejido rectal. El dolor debe ser una señal de advertencia: si te duele, tómate tu tiempo. Si no es así, ¡ve por el consolador!